Sinceridad

Hoy más que nunca me enoja el no estar a tu lado, el no poder abrazarte cuando ayer te escuché tan triste, no tengo con qué comparar el sabor a tristeza que tenía ayer tu voz, ese gusto a pensamientos profundos, nostálgicos, que me partió el corazón. Sentir tu tristeza, tu tristeza honda & saber que no iba a poder calmarla, que mis manos siguen atadas, que, por mucho que lo quiera, no estoy a tu lado, sé lo mucho que te enojaría saber que sentí que no merezco tu cariño, que sentí que no soy digna de ni un poquito de tu amor, pero es que, así como se me hace imposible controlar lo mucho que te amo, se me va de las manos sentirme no merecedora de todo lo que me das.

Perdona, mi falta de fuerza, mi decisión para mostrarme con miedos, para mostrarte todos mis errores justo esta semana, mi caída, mi nostalgia, mi falta de apoyo, mis mil mensajes en un sólo día, mis pocas llamadas. Hoy, sé que no existen dudas ni en mi mente ni en mi corazón de que eres el amor de mi vida, al que siempre quiero alegrar, del que quiero ser el soporte, al que quiero hacer sonreír, para el que mi hombro siempre va a estar, al que nunca mis abrazos van a faltarle, ese al que quiero entregarle todos mis besos, aquel al que no he dudado ni un segundo en entregarle mi corazón completo, ese en el que confío ciegamente, él, mi amor, que aunque hayan sido sólo 3 días a su lado han sido lo más perfecto que he vivido hasta ahora, él, el que nunca se aleja de mis sueños, de mis pensamientos, de mi corazón, ese al que el corazón le hace PUM PUM PUM cuando estoy a su lado & sus manos tiemblan cuando tocan las mías, él, el extraño, MI extraño, Alejandro, MI Alejandro. ÉL, al que amo sin reparos, él, que tiene en sus manos mi corazón entero. TE AMO.