At the end of the day, all I care about is to have your hand close to mine
sábado, febrero 23
El sonido de las llaves yendo y viniendo sobre su mano era lo único que rompía el silencio de la calle, que, a esa hora, estaba iluminada solamente por la fría luna llena. Oyó un silbido del otro lado de la calle, que iba al son de su juego con las llaves, caminó un paso, talvez, dos y se detuvo: reconoció el silbido, era él, siempre había sido él.
miércoles, febrero 20
Me miento cada que tengo ganas, me cuento historias que no fueron y no sé si alguna vez serán, a veces, hasta me digo que sé qué quiero y es que me gusta creerme, porque miento muy bien, porque sé que soy crédula, porque cierro los ojos e imagino que es verdad, que soy real, que existo. Cuando me digo la verdad, sé que no soy más que un invento, que soy (¡wow!) un invento, que en la cabeza de alguien existo o existí, que algunas partes de mí son verosímiles, pero que ninguna es verdad, porque, también, me gusta creer que soy una ilusión, que alguien me sueña y me imagina, que soy el escape de su realidad.
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